Gunnison Valley Mentors (GVM) tiene una rica historia arraigada en la creencia de que los adultos solidarios pueden marcar una diferencia positiva y tangible en la vida de los jóvenes. Todo comenzó a mediados de la década de 1980 cuando un esfuerzo de tutoría llamado "Campeones de los niños" ganó fuerza en el condado de Gunnison, Colorado. Inspirados por este movimiento, un grupo de ciudadanos locales dedicados, incluidos Tim Holt, Nick Lypps, Steve Patrick, Nancy Riemer, Janet Reinman, Tina Swift y Kathy Young, se unieron y fundaron Gunnison Hinsdale Youth Services, Inc., más tarde conocido como Gunnison Country. Socios, en 1990.
En sus primeros años, GVM brindó principalmente servicios de tutoría dentro del sistema de justicia juvenil, apoyando a jóvenes con alto riesgo de delincuencia y abuso de sustancias. Sin embargo, la visión de la organización se amplió con el tiempo y comenzó a ofrecer una amplia gama de programas y servicios educativos positivos para beneficiar a los niños y las familias de la comunidad. Estos incluyeron el Equipo de Evaluación Comunitaria del Proyecto de Ley del Senado 94 y la evaluación inicial, Comienzos Brillantes/Cálida Bienvenida para recién nacidos y niños pequeños, Equipo de Trabajo de Restitución para menores involucrados en el servicio comunitario, un programa de experiencia en la naturaleza al aire libre para edades de 14 a 18 años, el Programa Juvenil de Verano , clases y talleres para padres, prevención del embarazo adolescente, una Coalición de Activos Comunitarios y un programa con mentores pagados para jóvenes que ya están involucrados con el sistema de justicia.
Durante sus primeros años, GVM dependió en gran medida de la financiación de fuentes del gobierno estatal, y más del 90% de su apoyo financiero provino de esa vía. Sin embargo, en 2003, la organización enfrentó desafíos significativos cuando los recortes de fondos estatales obligaron a suspender muchos de los programas antes mencionados. Las iniciativas Tutoría, Bright Beginnings/Warm Welcome y el Proyecto de Ley 94 del Senado permanecieron relativamente intactas.
En 2006, un cambio en el liderazgo provocó un giro transformador para GVM. La junta directiva realizó una evaluación integral de los programas de la organización, alineándolos con la misión y los fondos disponibles. Con el compromiso de centrarse únicamente en convertirse en la principal organización de mentores, la junta tomó la difícil decisión de dejar de lado los programas y servicios periféricos a la misión. Este enfoque renovado condujo a un crecimiento notable, aumentando la cantidad de jóvenes atendidos en relaciones de mentoría de 37 en 2006 a 229 en 2014.
Como parte de su continua dedicación al desarrollo juvenil, GVM también opera el Programa Juvenil de Verano, un campamento diurno basado en habilidades de liderazgo que atiende a 100 niños entre las edades de 6 y 11 años cada verano. Este atractivo programa ofrece una variedad de actividades al aire libre diseñadas para fomentar la autoconciencia, la autorregulación, la motivación, la empatía y las habilidades sociales. Además, en 2016, GVM presentó Youth Townie Work Corps, que ofrece habilidades laborales prácticas y conocimientos sobre futuras carreras profesionales para jóvenes de 12 a 15 años a través de varios proyectos en todo el valle.
El cambio en la cultura de la junta y el compromiso inquebrantable con la tutoría han generado cambios positivos significativos para GVM. Estos incluyen una base de financiamiento más diversificada, el establecimiento de un hogar permanente en el Centro de Tutoría Escolar de 8th St, un mayor impacto en los jóvenes atendidos y una presencia más fuerte dentro de la comunidad.
Hoy, Gunnison Valley Mentors continúa siendo un faro de esperanza, brindando a los jóvenes mentores afectuosos que los guían, apoyan y capacitan para desarrollar todo su potencial. Con una rica historia y un firme compromiso con la tutoría, GVM sigue dedicada a transformar las vidas de los jóvenes y construir un futuro mejor para nuestra comunidad.